El imperialismo estadounidense tiene rostro de bandido, nació de las huestes del anglosajón imperio y está trizada su hegemonía, porque no ha dejado de penetrar con su subversión política e ideológica para destruir nuestra esencia independentista, tejida de pueblos, de luchas, de resistencias de emancipación.
Desde el Río Bravo, América está sedienta de unidad, de integración, de independencia, de libertad, para abrazar, cosmovisiones, sueños, saberes y un permanente telar de revoluciones con democracias soberanas, antihegemónicas y antimperialistas.
Tenemos de Simón Bolívar, Alexandre Pétion, Alfaro, Martí, Zapata, Sandino, Fidel, El Che. Conocidas, además, como las revoluciones de: los Barbudos, Sandinista, Bolivariana de la que bebió abundantemente Comandante Hugo Chávez Frías, del morral e ideario de Bolívar. Hoy se conmemora los 11 años de su partida a la eternidad. El Presidente Nicolás Maduro Moros, le da continuidad al poder comunal.
Revoluciones que están en permanente asedio e injerencia del otrora hegemón estadounidense, en crisis sin retorno y que no responden a sus nefastos intereses imperialistas, porque están tejidas de justicia social.
Interpelando a la memoria y la historia penetraron en Chile, destruyeron al gobierno de la Unidad Popular, cometieron magnicidio en contra de presidente Salvador Allende, y terribles violaciones de los derechos humanos, que muchas han quedado en la impunidad.
Son esas agencias ocultas en el Estado profundo estadounidense, como USAID, creada para boicotear la Revolución Cubana, que fue convertida en el brazo político e ideológico de la CIA, disfrazada de desarrollo, cuya esencia es injerencista y neocolonialista. Al parecer desactivada por Trump, pero no cesa su apetito neofascista y supremacista de invocar el Destino Manifiesto, Doctrina Monroe 2.0, Plan Cóndor 2.0, con el presidente Donald Trump.
Pretende ocultar la crisis sistemática y estructural que atraviesa la otrora hegemónica potencia del orden unilateral, de Wall Street y Hollywood, que nacieron torcidas, ya que reproducen a un imperio herido, bélico, que ha sembrado la aldea global de más de 800 bases militares yanquis, pero que no baja su tono belicista, anexionista y su pretensión de convertir a Canadá en uno de sus Estados, de tomar el Canal de Panamá, que le pertenece al pueblo panameño, ponerle un nombre yanqui y de vaciar a Gaza de palestinos para convertir en una Riviera azul con una gran infraestructura. No hay que desconocer que el presidente Trump, es un empresario bursátil, que ahora está cobrando la enorme factura invertida por Biden, al titiritero Zelensky, no era gratis el sabotaje en North Stream 1, 2, en el conflicto, entre la Federación de Rusia, Estados Unidos y el gran patio subordinado de la Unión Europea (UE), aunque los miles de muertos fueron eslavos, posteriormente, mercenarios reclutados en Latinoamérica y El Caribe, entrenados en las bases militares estadounidenses.
Tenemos la diáspora de África, diseminada en Centro América y El Caribe.
En Haití, el general Pétion, abrazó la causa independentista del General Simón Bolívar, hoy sitiada, saqueda, invadida, gracias a la tozudez mezquina de las Naciones Unidas, la gran antesala de la diplomacia global, en dónde el lobby nazisionista- imperialista, tiene el poder de veto, y de dar continuidad al genocidio del hermano pueblo de Palestina.
Ergo, el magnate supremacista presidente Trump, mediante órdenes ejecutivas desató la cacería de migrantes fundamentalmente latinoamericanos, se apresta a aplicar aranceles a China, Canadá, México y diseña una lista de países con los cuales puede suscribir un Tratado de Libre Comercio. Tiene reactivado el bloqueo en contra de Cuba, eternamente solidaria con la humanidad, para colmo alevosa y abusivamente convierte a Guantánamo- que es territorio cubano- en prisión de migrantes configurados como terroristas. Similarmente, recrudece el enracimado de medidas coercitivas unilaterales, sanciones en contra de Nicaragua y Venezuela Bolivariana.
Las puntas de lanza del gabinete de Trump, Marco Rubio y Elon Musk, se frotan las manos por los recursos naturales y energéticos, de Venezuela Bolivariana, por cierto, muy abundantes en Nuestra América, rebelde, libertaria. Mal hacen en llamar libertario al bufón de Milei, no es más que un títere que ha cometido fraude y estafa con su moneda virtual y regresión de derechos al hermano pueblo argentino, donde las pocas Madres y abuelas de Plaza de Mayo que quedan no dejan de seguir levantando sus voces, por más hijos y nietos, quienes están apareciendo.
En Paraguay continúa el neoliberalismo, pero el pueblo se está calentando. Por ahora en Uruguay el Frente Amplio, regresa al poder.
En Chile, el neoliberalismo no da tregua y vemos en el horizonte a Daniel Jadue, levantando la bandera de la unidad popular, en la disputa por el Palacio de la Moneda, ahora convertido en otra víctima del Lawfare.
Gabriel Boric ha significado un terrible fraude para el pueblo chileno, quien continúa subordinado al magnate de Washington y que mantiene la criminalización del pueblo Mapuche. Milei, mantiene en prisión a la luchadora y lideresa indígena, Milagro Sala, una presa política.
Seguimos por la cordillera y entramos al Perú, atrapado por el neofascismo y un régimen de facto, mientras el patrón represivo de Fuerzas Armadas y Policía es el mismo copy paste, en toda la región, se trata de reprimir, combatir, al denominado enemigo interno, columna vertebral de la Doctrina de Seguridad Hemisférica y Continental estadounidense.
En Ecuador son ocho años de neoliberalismo, autoritarismo, con predominio oligárquico-corporativo y familiar de un presidente-candidato estadounidense, negacionista del Estado, al que exprime a las empresas estratégicas, fundamentalmente energéticas sus recursos naturales, ahora en pleno carnaval, se está concesionando o privatizando el campo petrolero más grande como es Sacha.
Mientras tanto, la narcoviolencia, ha convertido al país en el ícono de la violencia e inseguridad en la región latinoamericana, que tiene activada la persecución política selectiva a quienes confrontan y no se someten a su agenda palaciega, contaminada de masacres carcelarias, la data de crímenes más alta en la historia del Ecuador.
Como columna vertebral del asedio e injerencia en la región, ya están presentes los marines estadounidenses, en la provincia insular de Galápagos, realizando ejercicios militares, desde allí es rentable geopolíticamente el control del Pacífico Sur, no para controlar el alcaloide, que perfora la nariz de millones de estadounidenses, sino para contener el avance de China y Rusia en la región.
Entonces, tiene una importancia geopolítica, geoeconómica y geoestratégica, la presencia de fuerzas especiales extranjeras, invocadas por presidente- candidato, que violenta la soberanía territorial del Ecuador, con el gran pretexto palaciego de guerra total al terrorismo, a líderes y lideresas sociales, activistas y defensores/as de derechos humanos, que denuncian las recurrentes violaciones como desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales, observadas por expertos de ONU Comité de Derechos Humanos; Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Amnistía Internacional, Human Watch Rights y otros organismos nacionales e internacionales.
Por ahora un balotaje electoral entre la única candidata mujer a la Presidencia de la República Luisa González, de la organización política Revolución Ciudadana, mantiene la disputa con el presidente-candidato, Daniel Noboa Azín, de Alianza Democrática Nacional (ADN), se medirán el 13 de abril, por el Palacio de Carondelet.
Dos modelos de país, se enfrentan: el de la justicia social representado por Luisa González y el del neoliberalismo y achicamiento del Estado, pero muy importante para la concentración de riqueza de la cofradía, corporación oligárquica y familiar, que destila vestigios de neocolonialismo, presunciones de corrupción, el cometimiento de algunos delitos concurrentes; es decir, una especie de gran hacienda con recurrentes violaciones de la Constitución, el marco legal y de derechos humanos.
Quiere convertir a Ecuador en un Plan Mérida y Colombia, con penetración de mafia de los Balcanes.
En Colombia, la maquinaria oligárquica y neofascista, no se detiene en la desestabilización del régimen de presidente Gustavo Petro. Existe una gran fractura y herida dejada por lo que fue el Plan Colombia y el constante ataque massmediático, comunicacional y virtual de Uribe y sus monaguillos, al que le salpica la masacre de más de seis mil 250 jóvenes, a los que denominó falsos positivos.
Desde México hasta la Esequiba venezolana, estamos atravesados/as de lucha y resistencia, de una inconclusa Segunda Independencia, huele a zapatismo, ahora con rostro de mujer; en Nicaragua, sigue vivo el sandinismo, en Venezuela Bolivariana, la Revolución Bolivariana, convertida en poder comunal, que tiene raigambre de Bolívar, Chávez y Maduro.
Cuba mantiene viva su revolución, la solidaridad, su dignidad, soberanía y el poder popular junto al gobierno revolucionario que jamás claudicarán, porque el camino trazado y construido es irreversible con justicia social y derecho de su pueblo de vivir en paz.
Es la hora de reactivar nuestros mecanismos de integración desde el Sur y para el Sur, UNASUR, ALBA-TCP, CELAC, desde nuestras miradas libertarias de independencia y libertad.
Unidad en la diversidad, encontrémonos nuevamente, en el sueño y la espada de emancipación y libertad de Simón Bolívar.
rmh/leg